Efectivamente están en la base de la vida, en la naturaleza humana, las pulsiones que nos empujan hacia uno u otro destino, hacia el amor o hacia la destrucción.
De una u otra forma, siempre están presentes y a lo largo del pasado siglo XX hemos visto en todo su esplendor cómo Tánatos dejaba caer sus bombas con una capacidad destructiva antes desconocida. Lamentablemente, el siglo XXI no parece que haya redirigido las pulsiones hacia Eros, sino más bien al contrario. En el mundo globalizado vemos dia sí dia también que la destrucción del otro es el objetivo de muchos. La excusa es irrelevante, creencias religiosas, culturales, territoriales, económicas....no acabaría nunca de listar. Pero la pulsión destructiva lleva una gran ventaja, va por delante en las encuestas, podríamos decir.
Una vez nos han habituado a que pasemos indolentemente por la información de los millones de personas que simplemente no pueden sobrevivir porque mueren de hambre. En pleno siglo XXI. Una vez nos han convencido de que el prójimo no es importante y que si lo está pasando mal seguramente es porque se lo merece. Una vez nos han convencido de que estas o aquellas costumbres o culturas son negativas, e incluso peligrosas. Que determinados sistemas de "destrucción masiva" sólo pueden estar en manos de unos, pero de ninguna manera en las de otros -aunque francamente de lo que deberían convencernos es de que no han de estar en las manos de nadie, ni de unos ni de otros-.. Pues una vez convencidos y convenientemente aletargados en este Matrix global, ahora toca el siguiente paso, convencernos de las bondades del pensamiento único.
Quizás por ello, y como ejemplo para el resto, toca castigar con la destrucción a Grecia, mejor dicho, a los griegos. Un castigo ejemplar. Se lo merecen, por haber creído que podrían vivir trabajando y endeudándose indefinidamente. Craso error, tienen que tener claro que han de trabajar más, eso sí, cobrando menos y por encima de todo, pagar antes que nada la deuda a los usureros. Si no tienen trabajo, pues nada, igualmente lo fundamental es que paguen la deuda. Que no pueden pagar la deuda porque no tienen trabajo, pues nada, el Estado tendrá que recortarles las prestaciones sociales, porque ante todo el Estado ha de pagar la deuda. Que sin trabajo jamás podrán pagar la deuda y al no tener prestaciones sociales no podrán sobrevivir y se verán abocados a la marginación. Pues nada, es lo que se han ganado por su mala cabeza. Que abocados al desastre se manifestarán y probablemente provocarán incidentes....pues nada, a utilizar a las fuerzas de seguridad -por cierto, tendrán que contratar más- y a comprar materiales antidisturbios. Por cierto, habrá que estar pendiente de qué empresas son las que los fabrican y en qué paises. Por cierto, habrá que estar pendientes de quién concede créditos al Estado para comprar material antidisturbios.
Por cierto, recomiendo este artículo de Irene Martín Cortés publicado en el Pais :Los griegos, sacrificados en el altar de Europa: http://elpais.com/elpais/2012/02/08/opinion/1328720285_297511.html
Además castigando duramente a los griegos se hace pedagogía. Así los demás irresponsables verán que con la deuda no se juega.
Y volvemos a casa. Este señor que decía que haría lo que había que hacer, como dios manda, ha empezado a hacerlo. Claro que ahora dice que lo que hay que hacer seguramente no servirá para nada en los primeros años. Es más, como es sincero, pues dice la verdad, que esto irá a peor durante los primeros años. Claro que se supone que no está ahí solamente para decirnos la verdad, porque esta verdad ya la conocíamos, es decir que no saben hacer nada más que seguir las indicaciones de la jefa de los usureros y prestamistas. Como los de antes, sí es cierto, como los de antes. La diferencia es que los de antes lo hacían a contracor, sabiendo que las pulsiones tanáticas podrían tener unos efectos muy perversos y estos lo hacen con alegría. Además se ufanan ante los usureros de los que van a hacer y de la "agresividad de las medidas que van a tomar". Con alegría, como en cualquier charla de café hablando del Barça-Madrid, "verás qué paliza les vamos a dar, se van a ....las patas abajo". Con alegría. Convencidos. Qué bien que están quedando ante los usureros.
Todo esto lo hacen por nuestro bien. Porque somos como los griegos. Y para que no nos pase como a los griegos, que hay que ver lo mal que lo están pasando y lo mal que lo están haciendo los gobiernos griegos. Está claro que los usureros han de actuar para poner en su sitio a los griegos. Nuestro caso es diferente. España es diferente. Aquí hay que evitar a toda costa que Europa tome medidas parecidas a las que están tomando con los griegos. Y para evitar que Europa tenga que tomar esas medidas, Mariano ya tiene la solución. Las tomará él, porque hará lo que hay que hacer. Eso sí, como dios manda. Francamente me cuesta ver la diferencia. Entre que me maten o yo me pegue un tiro nunca he sido capaz de ver la diferencia.
Afortunadamente, en mi caso Eros siempre ha triunfado sobre Tánatos. Por desgracia, para estos del pensamiento único, los EROS (en Catalunya Expedient Regulació Ocupació) no son precisamente pulsiones de vida, sino pulsiones tanáticas aplicadas a la colectividad y los individuos que tendrán probablemente también una acción-reacción destructiva. Me temo que en este partido Tánatos será el gran triunfador.
Aunque es la notícia del dia y por todos conocida, os dejo el link de las "medidas que hay que tomar" y que ya están tomando http://economia.elpais.com/economia/2012/02/10/actualidad/1328911729_685382.html
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